Apenas unos días después de que la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) advirtiera que, desde la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada, la Argentina cayó 26 puestos en el ránking que mide la libertad de prensa en todo el mundo, Amnistía Internacional advirtió que el Presidente ataca sistemáticamente en las redes sociales a periodistas y referentes de la Cultura.
El organismo realizó un relevamiento desde el 10 de diciembre pasado cuando Milei asumió al frente del Ejecutivo y advirtió que en los 142 días que lleva de gestión el referente de la ultraderecha local atacó a 21 periodistas y referentes culturales, es decir uno por semana.
«Una vez a la semana, el presidente Javier Milei ataca a un periodista o a una personalidad de la cultural”, advirtió Amnistía Internacional Argentina y subrayó que se trata de «un dato alarmante».
En ese sentido Amnistía Internacional señaló que el Día Internacional de la Libertad de Prensa celebrado el viernes pasado “es una instancia más para reflexionar sobre la importancia de proteger este pilar fundamental de la democracia”.
Y consideró que «es preocupante ver cómo este derecho es constantemente vulnerado” por el presidente Milei.
Sobre los ataques y agresiones especialmente dirigidos a periodistas y figuras de la cultural, Amnistía Internacional precisó que “en Twitter (ahora llamada X) comúnmente se despliegan repertorios de insultos y amenazas contra aquellos que critican o señalan diversos temas de interés público”.
[LIBERTAD DE PRENSA] Un relevamiento de @amnistiaar advierte que en 142 días de gobierno, Milei atacó a un total de 21 periodistas y personalidades de la cultura. Es decir, una vez a la semana. El dato es preocupante. pic.twitter.com/EfeFKVp0Sp
— Amnistía Internacional Argentina (@amnistiaar) May 5, 2024
«No solo genera un clima de intimidación sino que también amenaza el derecho a la libertad de expresión, evidenciando una clara intención de silenciar voces mediante amenazas, escraches y exposición», señala el informe de Amnistía.
Y puntualizó que «lo que agrava aún más esta situación es que el principal responsable de estos ataques ocupa el cargo de presidente de la Nación».
La organización de defensa de los derechos humanos aseguró además que «esta realidad no solo genera un clima de intimidación para quienes ejercen la libertad de prensa, sino que también amenaza el derecho a la libertad de expresión, evidenciando una clara intención de silenciar voces mediante amenazas, escraches y exposición».
Libertad de prensa en peligro
El sistemático ataque a la prensa de Javier Milei comenzó desde el primer día de gestión cuando suspendió por un año la pauta de medios en lo que fue el prolegómeno de su estrategia de ahogar financieramente a sus «enemigos». Más en evidencia quedó semanas más tarde con su intento por disciplinar a los gobernadores díscolos por medio del ahogo financiero.
Las consecuencias de este ataque a los medios de comunicación alarma al sector tanto en la Argentina como en el resto del mundo. Prueba de ello es el derrumbe de la Argentina en el ránking que mide todos los años la libertad de prensa en el mundo.
Desde la llegada de Milei a la Casa Rosada la Argentina cayó 26 puestos en dicho ránking y la organización encargada de elaborar la estadística advirtió que la llegada al poder del líder libertario «marca un nuevo y preocupante punto de inflexión para la garantía del derecho a la información en el país».
Cuando quien está al frente de estos ataques es el presidente de la Nación, no solo se genera un clima de intimidación. También se amenaza el derecho a la libertad de expresión porque se observa una intención de silenciar voces con amenazas, escraches y exposición.
— Amnistía Internacional Argentina (@amnistiaar) May 5, 2024
El informe «Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2024: los peligros de la industria del engaño», elaborado por la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) ubicó a la Argentina en el puesto número 66 de un total de 180 países. El ránking está liderado por Noruega, Dinamarca, Suecia, Países Bajos y Finlandia.
La entidad definió a la Argentina como un país con «problemas significativos» en lo que se refiere a la Libertad de Prensa. En la misma situación se encuentran países vecinos como Brasil, Chile y Uruguay.
«A escala mundial, se impone una constatación: la libertad de prensa está amenazada por los mismos que deberían ser sus garantes, las autoridades políticas. De los cinco indicadores que conforman la puntuación de los países, el indicador político es el que más desciende en 2024, con una caída de 7,6 puntos», señaló la nueva edición de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa elaborada por Reporteros Sin Fronteras.
En lo que respecta a la Argentina, la organización detalla que «la alta concentración y la opacidad de la propiedad de los medios, la polarización, la ausencia de políticas públicas para garantizar la pluralidad, así como la precarización del ejercicio del periodismo constituyen las principales amenazas a la libertad de prensa en Argentina».
«Todo ello abona el terreno para las presiones por parte del Gobierno y las empresas a través de la publicidad privada y estatal, y del uso partidista de medios públicos nacionales, provinciales y municipales», señala RSF.
Y advierte: «La llegada al poder de Javier Milei, abiertamente hostil con la prensa, marca un nuevo y preocupante punto de inflexión para la garantía del derecho a la información en el país».
En la anterior edición del ranking de Reporteros Sin Fronteras, la Argentina había obtenido el puesto número 40, es decir que cayó 26 lugares.
Los días antes de la asunción del libertario al frente de la Casa Rosada, RSF había manifestado que seguiría «de cerca al mandato» de Milei por considerar que su «agresividad hacia la prensa es una señal de alerta».
Luego, ante la decisión del Gobierno de cerrar la agencia estatal de noticias Télam, la organización había afirmado que se asestaba «un duro golpe al derecho a la información» en la Argentina.
En su último informe, Reporteros Sin Fronteras alertó que «el ejercicio de la pluralidad se ve condicionado por déficits en las políticas públicas y por una elevada concentración» y apuntó también al hecho de que «en las últimas décadas, la confrontación política ha tenido un reflejo directo en el sector de los medios, con un empobrecimiento de la calidad de análisis e información».
«El fomento del odio y la violencia encuentra eco en medios de diversas tendencias. Las cuestiones sociales, económicas y políticas delicadas se mantienen fuera del debate público, y la agenda mediática está muy concentrada en las grandes ciudades, especialmente en Buenos Aires. El presidente de extrema derecha Javier Milei, elegido en 2023, alienta las agresiones a periodistas y los ataques para desacreditar a medios y reporteros críticos con su política. Sus partidarios lo difunden ampliamente», advierte el informe.
Tras subrayar que «persisten intentos de silenciamiento más sutiles, como presiones económicas y el abuso de las demandas civiles» contra los periodistas, RSF señala que «la prensa argentina se ve afectada por las persistentes dificultades económicas de la última década, que han precarizado el empleo y los recursos».
Finalmente, el informe sostiene que «los reporteros están expuestos a ser blanco de intimidaciones por parte organizaciones delictivas (narcotráfico, trata de personas, mafias de policiales, etc.) y de la violencia policial cuando cubren manifestaciones». Minutouno