Por Gustavo Martínez * y Laura Testa **
Diversas clínicas privadas que trabajan en el territorio bonaerense reconocen que están entrando en convocatoria de acreedores. Ninguna otra situación podía esperarse con un modelo político y económico que cree que la mano invisible del mercado todo lo regula.
En este contexto, lo que pretende IOMA en todo momento es brindar el mejor servicio para sus afiliados y afiliadas y por eso entiende que el cuidado de las clínicas es fundamental. Sin embargo, es importante hacer mención a que la crisis económica que atraviesa la Argentina es el resultado de las medidas impulsadas por el Gobierno Nacional de Javier Milei que tiene, entre otras, la concepción de que el libre mercado lo resuelve todo. Concepción que nada tiene que ver con la de nuestra obra social que se basa en un sistema de salud solidario.
Debido a las últimas decisiones en materia de liberalización de precios, entre otros, el sector de la salud atraviesa una crisis sin precedentes. Las consecuencias de las políticas liberales libertarias se puede observar en la difícil situación que viven los prestadores privados, como clínicas y sanatorios, que por problemas de costos fijos y sostenimiento de lo cotidiano se están viendo obligados para no llegar al cierre a disminuir sus ofertas de servicios prestacionales y a no actualizar salarios de su personal de salud y/o a reducir la cantidad de profesionales que integran los equipos de atención en todas las áreas.
Sobre este particular, cabe señalar que la mayor parte del presupuesto que necesita una clínica corresponde a salarios de su personal teniendo en cuenta todo el plantel que lo integra. Este porcentaje representa entre el 55% y el 65% del coste total necesario para mantener sus puertas abiertas y brindar prestaciones de salud de calidad. No es culpa del IOMA que no se pueda enfrentar estos costos.
No es cierto que esta situación se debe a que la obra social paga las prestaciones a 60 o 90 días como sostienen ciertos sectores con intereses políticos para desprestigiar a la obra social. IOMA abona a las clínicas 45 días luego de haberse efectuado la factura. Un plazo razonable entendido dentro de lo que son pago a proveedores. Nuestra obra social desde el inicio de su gestión le dio prioridad al manejo financiero, es por esto que en ningún momento dejó de pagarles a las clínicas.
Aumentos salariales otorgados al sector
Con respecto a los salarios, cabe recordar que se regulan de acuerdo a los convenios colectivos en sanidad y en lo que va de 2024 este sector recibió un incremento del 46%. Sumado a esto la desregulación para esta área produjo aumentos desmedidos en medicamentos e insumos, que en lo que va de la gestión de Milei fue del 113%.
El Programa Nacional de Fortalecimiento de los Equipos de Salud (FESCAS) creado en 2022 y que funcionaba como la continuidad del Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y a la Producción (ATP), contemplaba esta situación reconociendo una suma de dinero abonada por el Estado Nacional para los y las trabajadoras de la salud en clínicas privadas.
El FESCAS tenía como principal objetivo reconocer la difícil situación que estaban atravesando las clínicas producto de los aumentos (en general desmedidos) de los medicamentos y los insumos de salud.
Este programa representó un presupuesto de $65.646 mil millones de pesos para las 1340 clínicas adheridas en todo el territorio nacional, de las cuales el 37% están ubicadas en la Provincia de Buenos Aires y el 19,9% en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Con este beneficio, aproximadamente, cada una recibió un apoyo del Estado equivalente a $65 millones de pesos.
El fin del programa en diciembre de 2023 generó, entre otras cuestiones el cierre y la baja de prestaciones en clínicas y el aumento de los montos prestacionales para con las obras sociales, lo que generó un círculo vicioso para el sistema de salud en su conjunto imposible de abordar en su totalidad generando graves consecuencias en la caída de la calidad de atención y coberturas. Producto de la situación económica del país, IOMA no queda exenta de este y otros problemas económicos financieros que debe enfrentar. La difícil etapa que vive la obra social por el impacto de las políticas económicas nacionales impuestas, claro que es un tema preocupante del cual la gestión se ocupa para paliar estas situaciones y ayudar a transitarlas y superarlas.
En lo que va de 2024 se ha otorgado aumentos a las clínicas por encima de la inflación generando un recupero en términos reales. Esto es fruto de la importancia que sabe IOMA que tienen las clínicas en términos de contención social pero, además, por la cantidad de trabajadores y trabajadoras que alojan estos sectores de la salud.
Los aumentos fueron en enero del 25%, febrero 40%, mayo 13% y abril 9,5%, lo que da un incremento para el 2024 del 87,5% frente a una inflación de 64,87% lo que representa un aumento del ingreso real equivalente al 14%.
Es necesario hacer un repaso situacional sobre cómo IOMA siempre intentó que los sectores de la salud fueran ganándole a la inflación y recuperaran poder adquisitivo. Entre 2015 y 2019 las clínicas tuvieron una caída de los ingresos reales del 29,4%. Es por esto, que durante la gestión que abarca de 2020 a 2023, con Pandemia de por medio, hubo que hacer un enorme esfuerzo para recuperar lo que las clínicas venían perdiendo, además de los aumentos que recibieron las clínicas también se le dieron aumentos diferenciados a partos y cesárea, sostén sistemático y fuera de módulos para continuar con el sendero de recupero para con las clínicas.
Sumado a eso, durante la pandemia nuestra institución incluyó un plus por sustentabilidad para que las clínicas pudieran seguir funcionando.
Pero este crecimiento se vio afectado por la brutal devaluación de diciembre de 2023 del 118% (ver gráfico) lo cual generó un espiral inflacionaria superior al que ya había, colapsando este sendero de recupero.
En IOMA, la obra social de las y los trabajadores de la provincia de Buenos Aires, seguiremos en el camino de encontrar soluciones para superar las dramáticas situaciones a las que somete un modelo político económico nada solidario e insensible a las necesidades del pueblo. Bajo estas premisas y convicciones seguiremos sentándonos para encontrar resoluciones válidas a los problemas que hoy acucian al sector de la salud como ha sido siempre nuestra voluntad.